Cita 1
He visto madres de familias numerosas que no se daban cuenta del trabajo que tenían ante sí y ante su propia familia. Querían ser misioneras y hacer una obra grande. Deseaban un puesto elevado, pero descuidaban el mismo trabajo que en su casa se les había asignado. ¡Cuán importante es que la mente se despeje! ¡Cuán importante es que el cuerpo esté tan libre como sea posible de la enfermedad, a fin de que podamos hacer el trabajo que el Señor nos ha encomendado, y esto de una manera que permita al Maestro decir: “Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré: entra en el gozo de tu señor.” Mateo 25:21. Hermanas mías, no despreciéis las pocas tareas que el Señor os ha dado que hacer. Sean las acciones cotidianas tales que en el día del ajuste final de cuentas, no tengáis que avergonzaros frente a lo que anotó el ángel registrador. -1JT 187.3 {Joya de los Testimonios}
Cita 2
“La madre es la reina del hogar, y los niños son sus súbditos. Ella debe gobernar sabiamente su casa en la dignidad de su maternidad. Su influencia en el hogar ha de ser suprema…. Nunca la terquedad se debe dejar sin reprensión…. Es imposible describir el mal que resulta de dejar a un niño librado a su propia voluntad.”—Consejos para los Maestros Padres y Alumnos acerca de la Educación Cristiana, 86, 87.
Cita 3
“Los hábitos de la madre influirán en el niño para bien o para mal. Ella misma debe regirse por buenos principios y practicar la temperancia y la abnegación, si procura el bienestar de su hijo…. Tanto los padres como las madres están comprendidos en esta responsabilidad. Ambos padres transmiten a sus hijos sus propias características, mentales y físicas, su temperamento y sus apetitos…. La pregunta de todo padre y madre debe ser: ‘¿Cómo obraremos con el niño que nos ha de nacer?’ Muchos han considerado livianamente el efecto de las influencias prenatales; pero las instrucciones enviadas por el Cielo a aquellos padres hebreos … nos indican cómo mira nuestro Creador el asunto.”—Historia de los Patriarcas y Profetas, 604, 605.
Cita 4
“La madre si ha de ser una maestra idónea para sus hijos, debe antes del nacimiento de éstos, formar hábitos de abnegación y dominio propio; porque ella les transmite sus propias cualidades, sus propios malos o buenos rasgos de carácter. El enemigo de las almas entiende mejor este asunto que muchos padres. Presentará tentaciones a la madre sabiendo que si ella no lo resiste, el niño será afectado por esto. La única esperanza de la madre está en Dios. Debe buscar en él gracia y fortaleza. No buscará en vano esta ayuda; Dios la capacitará para transmitir a sus descendientes cualidades que les ayudarán a tener éxito en esta vida y a ganar la vida eterna.”—Counsels on Diet and Foods, 219.
Cita 5
“En los hijos confiados a su cuidado, toda madre tiene un santo ministerio que ha recibido de Dios. ‘Toma a este hijo, a esta hija,’ le dice; ‘edúcamelo; fórmale un carácter pulido, labrado para el edificio del templo, para que pueda figurar para siempre en las mansiones del Señor.’”—El Ministerio de Curación, 355.
Cita 6
“El hogar debe ser para los niños el sitio más atrayente del mundo, y la presencia de la madre en él debe ser su mayor atractivo…. Por medio de suave disciplina, de palabras y actos cariñosos, las madres pueden conquistar sus corazones.”—El Ministerio de Curación, 367.
Cita 7
“Por medio de una dirección bondadosa y prudente, los padres y las madres debieran unir a sus hijos por los poderosos vínculos de la reverencia, la gratitud y el amor; y debieran encender en sus tiernos corazones un ferviente anhelo de justicia y verdad. Mientras la madre trata de sembrar buenos principios, el padre debiera esforzarse porque la preciosa semilla no quede ahogada por el desarrollo del mal. Se necesita su austera disciplina para que los hijos adquieran firmeza y dominio propio…. Padres cristianos, trabajad bondadosa y pacientemente en favor de vuestros hijos.”—The Signs of the Times, 10 de noviembre de 1881.
GS – 11/26/2022
*Las citas de este libro se actualizan constantemente